(Octava Real)
Sentí gran tristeza cuando caminaba
rumbo a la casita perdida en el monte
y no había luces en el horizonte
tan sólo una estrella surgió de la nada,
era tan bonita, tan inesperada
que fui caminando siguiendo su luz
en aquella casa, me encontré a Jesús
y así mi tristeza, murió
abandonada.
©Julie Sopetrán
Deso a todos mis Lectores y Amigos, Feliz Año 2025