(Seguidillas)
En la casa de enfrente
se oye un lamento
es la niña que llora
lo que presiento.
¡Quien fuera un ángel
para borrar el llanto
que deja el aire!
El monte de mi pueblo
se está quemando
Y no tengo la lluvia
para apagarlo.
¡Quien fuera nube
para apagar el fuego
que nos destruye!
Quiero barrer del suelo
las hojarascas
recoger esos palos
que ya son ascuas.
¡Y no me dejan!
Pero el clima devuelve
lo que le entregas!
En la casa de enfrente
quedó en silencio
la niña que guardaba
presentimientos…
¡Quien fuera un ángel
para borrar el llanto
que dejó el aire!
©Julie
Sopetrán