Los seres
diferencian, determinan
identifican faltas
por su juicio;
confunden división
con beneficio
y marcan su silencio
en lo que opinan.
Los seres no
perciben, contaminan
diversifican rangos en su oficio;
apoyan su conducta en
el resquicio
de la puerta que
cierra o discrimina.
La lluvia, el viento
canta en mi ventana
y la sordera humana
no lo escucha
subyuga su ambición
que es egoísmo...
...sentir, vivir la
luz de la mañana
es patrimonio donde
el alma estucha
los tesoros ocultos
de si mismo.
®Julie Sopetrán