En la risa acaba el miedo
con el grito, juega el aire
con el grito, juega el aire
y en cada verso que llega
hay otro verso que sale
y así se riega el camino
de trovas interminables.
Comienza el fuego en el beso
Comienza el fuego en el beso
que va quemando la tarde
es la caricia del viento
en el árbol transformándose...
y en cada risa que cruza
una lágrima subyace.
es la caricia del viento
en el árbol transformándose...
y en cada risa que cruza
una lágrima subyace.
Cuántas emociones cargan
los miedos del peregrino;
cuánta belleza no grita
lo que hay detrás de los gritos
lo que hay detrás de los gritos
Se percibe su mudez
sobre el perfil de los ríos
¡Cuánta hermosura se pierde
o se muere en el camino!
sobre el perfil de los ríos
¡Cuánta hermosura se pierde
o se muere en el camino!
De mi libro: Llantos