Hay mares en mi cuerpo
llevándome a la orilla;
viejos acantilados
salpicados de espuma,
esponjas saturadas
secando su amargura
y una sirena al fondo
contemplando el paisaje.
Mientras voy navegando
se me ocurren los sueños,
los oasis de tierra,
los desiertos de agua
los inmensos amores,
las soledades dulces
y tantas, tantas veces
se me ocurren los sueños.
Son mares que me dejan
a la sazón vencida,
magullada de piedras
tiradas por el eco
de la falsa palabra,
del pasajero lazo
que se rompe, que chasca
hasta partir el aire
hasta sentir a trozos
la voz amartillada...
que me deja a la orilla
del mar y de la tierra.
Julie Sopetrán
De mi libro: Los cinceles del tacto.
Triste y bello.
ResponderEliminarBesos.
Eres increíblemente sensible, fuerte y serena. Me encanta tu poema. Gracias por compartirlo.
EliminarGracias por tu lectura y por tus palabras.
EliminarMuchas gracias, Amapola Azul. Me alegra mucho tu lectura. Un beso.
EliminarMe ha encantado. Como siempre usas bellas palabras para describir esas emociones tan profundas y con tanto fondo. Un abrazo muy fuerte
ResponderEliminarMuchas gracias, Miguel. Me alegra saber que te ha gustado. Ya estoy con tu libro. Mi abrazo.
EliminarQue bello Julie! Gracias!
ResponderEliminarMuchas gracias, Nidia. Me alegran tus palabras y saber que te ha gustado. Un fuerte abrazo.
EliminarHermosa tu poesia Julie me encanto
ResponderEliminarMuchas gracias por visitarme. Me alegra saber que te gustó. Besos.
EliminarDesde lo que siente la mar en este tiempo
ResponderEliminartan atribulado y en decadencia...pero al final ella igual sobrevivirá, porque es la voluntad divina de que así sea.
Un abrazo.
Gracias Meulen, estoy de acuerdo contigo, la mar sobrevivirá al animal humano, sin duda. Mi abrazo.
EliminarEres un oasis de tierra y un desierto de agua. Precioso Julie
ResponderEliminarQué alegría, Fernando, gracias por tu lectura. Mi agradecimiento por venir a leer este poema. Mi abrazo.
EliminarSigue navegando Julie, es bello tu sentir en este mar poético. Saludos amiga.
ResponderEliminarGracias, Sandra. Mi abrazo y cariño por tus palabras y tu lectura.
EliminarA veces las heridas que más duelen son aquellas que no tienen sangre, están llenas de dolor, soledad, traición, tristeza. Por eso, una vez localizadas nuestras emociones y sentimientos, tenemos que dejar de perpetuar su estancia en nuestro interior.
ResponderEliminarJulie, profundo sentir.
Un cariñoso abrazos.
Muchas gracias por tus palabras, Cristina. Estoy de acuerdo con tu reflexión. Agradezco mucho tu lectura. Mi abrazo fuerte y mi cariño, deseando que estés bien de salud. Besos.
ResponderEliminarUn poema muy triste pero de una sensibilidad exquisita en cada verso. Te dejo un abrazo grande y excelente inicio de semana Julie!
ResponderEliminarGracias, Eli. Agradezco mucho tu lectura. Yo también te mando mi abrazo deseándote salud y paz.
ResponderEliminarWonderful!
ResponderEliminar